sábado, 23 de abril de 2011

¡Corre Forrest corre!


Esta tarde viendo tv en pleno viernes santo sintonice TNT para ver la película de Forrest Gump protagonizada por Tom Hanks.

Además de admirar la gran actuación de este señor, llamó mi atención el enfoque del escritor en el personaje de Forrest y el mensaje que nos deja con este enfoque: La importancia de mantener el ojo sencillo en la vida, sosteniendo tus valores por encima de las ventajas que pudieras sacar de las situaciones.

A veces quisiera tener el leve retraso mental que presentaba este joven quién sólo cumplía y seguía las reglas de las personas que el consideraba más importantes, no por su posición sino por la forma en que se dirigían a él, como su propia madre y el Teniente Dan. Y construyo con esas enseñanzas su propio sistema de creencias, sin prejuiciar a las personas.

Más admirable aún es el amor que sentía por Jenny, tal cómo debe ser una persona enamorada: desde el momento en que la conoces hasta el momento de su muerte. Jenny no entendía el verdadero valor de tener un amigo como lo era Forrest, quería correr en la vida, quería sentir por ella misma lo que era "amar" y "vivir" buscando cumplir sus propios sueños que la hicieran volar, eso hacía a Forrest sentirse bien con ella. La amaba por lo que era: la niña que compartió con él los mejores recuerdos, que jugaba con él y lo cuidaba y defendía de los demás, una verdadera amistad la cuál tiene conexiones muy cercanas con el amor.
Forrest sabía lo que es amar y por eso nunca presionó a Jenny para que sintiera lo mismo que él, siempre la espero y aunque ella no quisiera estar con él, Forrest siempre la tenía presente en su mente y en su corazón. Me identifico mucho con esta forma de sentir.

Nunca se preocupó por buscar fama y dinero, sólo por hacer lo que la vida le presentaba en ese momento, era como si supiera que el destino tenía para él grandes cosas, pero el momento lo decidía el mismo destino y a él sólo le tocaba esperar. Esperar, sólo con un retraso mental como el que Forrest tenía somos capaces de entender esta palabra pues con tal retraso esa palabra no existe. En la mente de Forrest sólo estaba Jenny, su madre y Bubba las personas que más quería y como estaban en su mente no era necesario esperar.
La vida le trajo fama y dinero sin buscarlo y después de tenerlo no dejo de ser el mismo Forrest de siempre: de lento aprendizaje, pero noble, sencillo y enamorado de la vida y de sus seres más queridos. Gran enseñanza para el Teniente Dan el cuál encontró la paz que necesitaba acompañado de este retrasado que sabía más de la vida que cualquier persona en el mundo.

En vida existió un hombre que jamás se preocupó por la fama y el dinero, el cuál vivió 33 años y sus últimos 3 los dedicó a enseñar a los humanos que no debíamos de agobiarnos por lo que habríamos de comer el siguiente día pues cada día tiene su propia carga de agobio. Esta enseñanza no le trajo dinero, el cuál no importa pues cómo dijo Forrest: "mi madre me enseño que uno sólo debe tener con lo que puede vivir" y así entregó sus excedentes a la Iglesia y a obras de caridad, pero si le trajo la fama de ser EL HOMBRE MAS GRANDE DEL MUNDO.
Vivió hace más de 2000 años y su enseñanza es reconocida como la más influyente jamás existida en la Tierra. Conocida tal vez, influyente no lo creo pues como le dijo Ghandi a los ingleses: "Ustedes se dicen cristianos, pero si siguieran lo que su maestro mencionó en el Sermón del Monte resolveríamos no sólo nuestros problemas sino los problemas de todo el mundo".

Esta semana se conmemora la muerte de Jesucristo, asesinado por cargos falsos de sedición, siendo torturado, escupido, burlado y muerto como malhechor. Un hombre que siempre mantuvo el ojo sencillo pues no tenía donde comer ni donde dormirse y aún así fue alimentado y fue recibido por buenas personas. Este hombre puso en primer lugar El Reino y la justicia de Dios sabiendo que todas las demás cosas (comer, beber, tener vestido) le serían dadas por añadidura.
Mateo 5
Mateo 6



domingo, 3 de abril de 2011

AÑORANZA - EDUARDO DANGOND - LAUDELINO FERNANDEZ

Nostalgia















El temor aquí resiento
es temblor en movimiento
sin amor es lo que siento
y pues muero aquí muy lento.

Mi alegría es fingida
digo dentro de mi vida
un momento que se olvida
y regresa a su estadía.

Lloraría y sufriría
lástimas por mí traería
sin saber lo que sería
vivir en un mundo muerto.

Muerto, fingido no hay día
que acepte el camino y la vía
para alcanzar la alegría
con una vida sencilla.

Flores, árboles me dicen
los números que predicen
esos tiempos tan felices
que recuerdo siempre triste.