lunes, 20 de diciembre de 2010

A mi mejor amiga


Los momentos más apasionantes son vividos al momento sin explicarte porque llegaron, siempre olvidando el pasado, lo más importante es lo que estás escribiendo ahorita: la historia que estás representando en la actualidad. El vivir esa historia permite que los momentos apasionantes sean tan placenteros que no las distingas de la misma vida. La pasión vibra y quién la padece explota, rejuvenece, goza, percibe la vida plenamente sin pensar en su consecuencia, todo le ve fácil, la consecuencia es parte de la misma felicidad.

Quién vive la pasión no analiza, no es necesario analizar porque no existe un problema; los análisis son cuando existe un problema; cuando amas, gozas, vives y te apasionas los problemas no son parte de la realidad. Sólo está tu historia y la musa de tu historia, no te explicas lo más importante, se cierra en estas dos cosas y no puedes definir que es primero: tu historia o la musa de tu historia, están simbióticamente ligadas que no ves la línea de separación entre una y la otra.

Sólo existe Dios, el amor, tu pareja, tus amigos, tu familia pero todos los ves reflejado en la musa de tu historia y en tu historia misma. El tiempo vuela, pero el tiempo no es un medible en ese momento ya que el tiempo no existe, sólo se vuelve factor cuando no se encuentra tu musa,tu inspiración, tu droga, una droga adictiva que distorsiona tu campo dimensional creando un espacio en el que se encuentra esa droga: tu musa.

Entonces ha distorsionado tu tiempo y tu espacio, no importa. "¿Qué importancia tiene el tiempo cuando me encuentro con ella en cuerpo y alma?", "¿qué importancia hay en mi espacio si este lo comparto con el ser que me impulsa?Mi espíritu se alza en vuelo con sólo escuchar su nombre. Mis ojos saltan de alegría al solo observar su silueta, mi olfato se derrite en placer al pecibir el aroma de su piel, mis labios se humedecen al aproximar su rostro con esos hermosos labios de miel, mi piel se me estremecé al acercarse lentamente y si me toca suavemente sin querer, me eleva loca y ciegamente hasta alcanzar la plena cúspide del placer.

Es en el momento, ese momento en que no existe el análisis, solo la experiencia, la experiencia de vivir. Esos son los momentos plenos, son los momentos creativos, son los momentos que generan vida, son los momentos que más se recuerda.
Y yo estoy aquí, recordando esos momentos, analizando los placeres que existieron en mi vida. Buscando la plenitud.

No hay comentarios:

Publicar un comentario